3 beneficios de contar con un amigo peludo, según la ciencia

Los beneficios de tener a un perro en casa, van mucho más allá de la felicidad y tranquilidad que aportan a nuestros ambientes, en momentos en los cuales ningún otro factor externo puede ayudarnos. Según la ciencia, estos animales logran efectos positivos en la salud cardiovascular y en nuestro sistema inmunológico, además, reduce en un gran porcentaje los niveles de estrés.

Beneficios a nivel cardiovascular de tener un perro

De acuerdo con un análisis realizado en 2019, y publicado por la American Heart Association - Lifelong Learning, que tomó como muestra el Registro Nacional de Pacientes de Suecia y lo vinculó a la información individual entre registros por causa de muerte, datos sociodemográficos y de tenencia de perros; los científicos, descubrieron que tener un perro se asociaba a una disminución en un gran porcentaje de probabilidades, de fallecer a causa de una enfermedad cardiovascular para personas que han sufrido de un ataque al corazón o un derrame cerebral.

Por otra parte, un estudio publicado en Circulation: Cardiovascular Quality and Outcomes, afirma que tener un perro puede fortalecer la salud cardíaca, ya que se reduce la frecuencia cardíaca y la presión arterial, esto tiene como resultado un menor riesgo de padecer algún tipo de enfermedad en las arterias coronarias.

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Favorece al sistema inmunológico

Al tener a un perro en casa, también vamos a tener algunas bacterias, que por la limpieza excesiva eliminamos de nuestro ambiente, y aunque no parezca, resultan bastante necesarias para fortalecer nuestro microbioma.

Aunque para muchos resulte contradictorio, el cuerpo necesita naturalmente de los gérmenes, para trabajar en su normal funcionamiento, por lo cual quien acostumbra a tener una limpieza excesiva, termina enfermando frecuentemente. Los perros al salir y no cumplir con ciertos “estándares” de asepsia, se convierten en un reproductor de gérmenes, por lo cual un perro nos ayuda a fortalecer nuestro sistema inmune.

Por lo anterior, las personas con perros se enferman con menor frecuencia y y con menos gravedad. Así lo confirma un estudio publicado en Journal of Allergy and Clinical Immunology, en el cual se expone cómo es que esto influye en el desarrollo inmunológico, hasta lograr disminuir el riesgo de sufrir dermatitis atópica. Aunque, cabe aclarar, no debe tomarse absolutamente literal este mensaje, pues por su salud y la nuestra es importante tenerlos aseados, para evitar infecciones graves.

Relacionarse con un perro tiene la capacidad de disminuir el estrés

La ciencia comprobó que quien se relaciona con un perro presenta índices bajos de estrés en comparación con aquellos que no. De acuerdo con el estudio publicado en Psychogeriatrics, tener un perro logra aliviar la ansiedad e influye en un alto desempeño y nivel de satisfacción.

En este mismo estudio, los expertos probaron cómo mimar y acariciar a un canino por al menos 10 minutos, relaja la respiración y la tensión muscular. Así las cosas, esto puede influir directamente en la disminución de los niveles de cortisol, la hormona del estrés. Los dueños de mascotas creen sin duda que éstas les proporcionan apoyo emocional, sobre todo en momentos de estrés y afortunadamente la ciencia parece respaldarlo.

Además de esta, existen otras investigaciones que demuestran que tener mascota durante un evento que produce ansiedad, ayuda a reducir el estrés. Esto también, se encuentra respaldado por estudios que han demostrado que el buen humor de las personas aumenta y el mal humor disminuye cuando están cerca de su mascota, lo cual prueba sus beneficios inmediatos a corto plazo, fisiológicos y psicológicos..

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Ahora que conoces tres de los muchos beneficios que trae tener un amigo peludo, aprovecha más tu tiempo a su lado y llénalo de amor, porque más que una mascota es un amigo fiel que vas a tener de por vida, y aún mejor, solo te va a llenar de cosas positivas.